“… una de las cualidades máximas de un artista es que se convierte en una especie de alquimista. Tiene la capacidad de transformar algo
Hay una guagua modelo Van color negra que la guía un payaso. Ese payaso no está solo. Lo acompañan más payasos, tal vez seis o siete. Tienen dulces, muchos dulces. También helado. Helado con barquilla y bolitas multicolor. Si te ven solo caminando en la calle o lejos de tu mamá en un abrir y cerrar de ojos, van a estar allí, al lado de ti. Te van a ofrecer dulces; dulces muy ricos. Justo cuando vayas a decir “NO”, la puerta lateral de la Van va a deslizarse y sus manos te van a atrapar. Te taparán la boca para que tus gritos no se escuchen.
En una especie de trance entre la percusión mezclada con sonidos electrónicos y voces que no identificaba exactamente lo que me querían decir, escuché que se llamaban Matotumba. Todo hizo sentido entonces, pues pensé que su nombre hacía referencia a las leyendas de ultratumba y la hipnosis que me había causado su música era el efecto de esos sonidos del más allá pero no, no era así. Me equivoqué.
A pesar de conservar los elementos principales de exhibición de arte, grafiti, murales y música alternativa con los que originalmente se creó hace doce años la Feria de Cultura Urbana, este año la misma trae consigo unos elementos adicionales.
*Spoilers Alert*
En el matrimonio hay muchas cosas cotidianas que se tornan un tanto difíciles. Sería tonto no aceptarlo, y más tonto aun dejar que estas