Estamos acá nosotros; los que nos fuimos. Estamos con la traición de nuestros pensamientos volando a mil. Nosotros, los que la vida nos jugó la trampa de irnos lejos de nuestra patria por diferentes búsquedas, estamos desesperados.
I’d been anxiously waiting for a week to hear my dad’s voice after Hurricane Maria hit Puerto Rico on September 20th. He lives in Toa Alta, which by many accounts was one of the hardest-hit municipalities in all of Puerto Rico. He was finally able to call, and through the weak and cracked signal he uttered a sentenced I will never forget: “The situation is Dantesque! There’s no power, no communication, no gasoline, no clean drinking water, curfew starts at 6:00 p.m., and people who don't have cash can't buy food”.
That Dutch army jacket thrown away by a soldier decades ago had a story written in every thread, a story that remains in its seam. After forgotten, if selected, it will write another story these days. Thanks to the hands that re-design them and brought them back to life. Now they have a spirit animal to guide, protect and inspire their owners throughout their battles in life.
Nos fuimos en busca de otras alternativas, en busca de nuevas experiencias. Irse de Puerto Rico no significa no volver, tampoco haberse “quitado” y mucho menos te hace ni “vende patria”, ni estadista. La gente que se va tiene sus razones particulares y no todo el que se va, luego le va mal. Ni todo aquel que se va es porque estuviera muerto de hambre en Puerto Rico, o se va para vivir de ayudas del gobierno que le provea el tío Sam, o lo están buscando para matarlo o meterlo preso. Tampoco se va solo aquel que puede, como he escuchado que algunos opinan por ahí. ¡No!
Desde 1977 el Consejo Internacional de Museos (ICOM, por sus siglas en inglés) organiza y celebra el Día Internacional de los Museos (DIM). Como bien afirma el sitio web de la organización, este día sirve el propósito de conectar con el público y subrayar el rol de los museos como instituciones al servicio de la sociedad y de su desarrollo. Cada año, el DIM gira en torno a un tema en específico, pertinente a la coyuntura histórico-social que esté aconteciendo en el mundo.